Fue más difícil encontrar otras cosas. Un comerciante que casi siempre tiene pequeños candiles tenía tres en esta ocasión y le eché en falta los carburos de otras veces. Me comentó que aún disponía de cuatro que no tenía allí en aquel momento. Añadió que ahora suben coleccionistas desde la zona minera de Cartagena-
Había una lámpara eléctrica de fabricación belga, pero se habían pasado cuatro pueblos y medio en el precio. Como casi siempre ocurre por estas latitudes, bastante alejadas de zonas mineras; o se encuentran a precio muy asequible o algunos comerciantes se pasan de frenada en el mismo. Pero así es el mercado.
Un amigo, con quien había quedado, me trajo tres libros interesantísimos y raros.
Uno, de 1844, un informe encargado por
Otro, es un Atlas Geológico y topográfico de
Habría aún una tercera sorpresa. Me trajo una Estadística Minera de 1907, de la que estoy sacando datos para mis trabajos.
En fin, un sábado estupendo.
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